El conflicto suele ser algo inevitable en las relaciones con aquellos con los que tenemos que compartir cotidianidad o proyectos vitales. La mayoria de las veces somos capaces de solucionarlos, más o menos, sobre la marcha. Sin embargo, hay ocasiones que es tal la intensidad del mismo que recurrrir a una intervención externa es la mejor solución, ya que ésta puede ofrecer soluciones y alternativas a posiciones encontradas y aparentemente irreconciliables.
La Mediación es un proceso de solución de conflictos cuyo objetivo es que las partes inmersas en el mismo consigan solucionarlo de la forma más satisfactorias para ambas, aceptando la ayuda de un profesional Mediador.